8.15.2008

Pelusio y las supercuerdas + Influenza

Esto es lo que Pelusio dijo una vez, al ser consultado acerca de la teoría de las supercuerdas:

- Cualquiera.

Ahora bien, vayamos a un tema más importante: el arte.

El mundo de las artes no le da la espalda a Pelusio. Así como todos los jóvenes ignorantes creen que el 90 % de las canciones habla “del fassssooo locoooo” (punto para Capusotto y Saborido ahí), los intelectuales han sabido encontrar, desde tiempos inmemoriales, referencias a la obra Pelusiana en varias de las obras artísticas más importantes de todos los tiempos. Así, una corriente neopensadora polaca, llegó a publicar un paper en la Universidad de Varsovia, afirmando que el verdadero nombre del “Ulises” del irlandés Joyce era “Ulises se la come, Pelusio se la da”, pero por problemas con la editorial el nombre fue censurado. En el mismo paper se afirma que El Aleph, de Borges, no es más que una metáfora (delicadamente elaborada) de una neurona de Pelusio, puesto que en esa neurona sola cabe el conocimiento del Universo entero.

A continuación, transcribo unas estrofas sumamente representativas encontradas en 1993 en la casa del escritor argentino José Hernández, autor del Martín Fierro. Dichas estrofas se hallaron escritas en una servilleta, y la servilleta se halló en el segundo cajón de la cocina de Hernandez (segundo de arriba para abajo) y dicha cocina se halló en la casa de Hernández, y así sucesivamente.

Presten mucha atención a este párrafo en el que fue censurada nada más ni nada menos que la voz del Viejo Vizcacha:


"Tomo una guitarra y voy
A contarles una historia
Que no habla ni de gloria,
Ni de ayer, ni de hoy.
Habla de lo que soy
Y soy solamente escoria.

Sentado en el Amazonas
Al Grande Profeta ví
Emocionado me sentí
Al ver a tantas personas
Buscando su voz socarrona,
Tratando escuchar por ahí.

Y el Maestro apareció
Y a su nutria dejó de peinar
Y con su voz empezó a hablar
Y el cielo se oscureció
Y justo ahí me pareció
Que tuito iba a terminar

Mas todo lo contrario: empezó.
Pues ya no hay malas rachas.
Yo soy el Viejo Vizcacha
Un buen consejero que nació
Sabio a la buena de Dió´
Pero ese viejo me cacha.

Pelusio seguirá en su lucha
y su palabra ya se contagia
Con paciencia y verborragia.
A todo aquel que la escucha
Porque su voz no siempre es mucha
Pero es música, es color, y es magia."


Increíble, ¿verdad? ¿Verdad que sí?. Aún a mí, que lo sé casi todo acerca de Pelusio, se me pone la piel de gallina turuleca cuando releo estas líneas y contemplo que hasta los más grandes respetan y alaban al Más Grande.

Varias son las teorías, varios los capítulos importantes de la Historia del Arte que se le atribuyen a Su Majestuosidad, mientras Él, humilde y un poco chueco, sigue en el Amazonas, paseando, cerrando los ojos para escuchar el cantar de los pájaros y abriéndolos cada tanto para ver el salto de los Dorados surcando el río. Grande como siempre, enorme como nunca Pelusio, el Profeta incomprendido.

9 comentarios:

El acumulador dijo...

Querido tambuzzi, cuanto hay de cierto de la presencia de Pelusio y señora en la obra de Vincent Van gogh? le ruego disipe mis dudas y la de gran parte del mundillo pseudointelectual.
Le paso el link de dicha obra
http://www.vggallery.com/painting/p_0773.htm

alessandro tambuzzi dijo...

Lo vi, y efectivamente podríamos hablar de una referencia Pelusiana en la obra del holandés loco. muchísimas gracias por el aporte!

Anónimo dijo...

Pensé que venía por el lado de Charly, por lo de Influenza... pero una vez mas P elusio me sorprendió para bien.
Saludos, pasaré seguido

la niña z dijo...

Hablando de las supercuerdas, hoy leí lo de la "Máquina de Dios" y me quedé pensando qué diría Pelusio al respecto.

alessandro tambuzzi dijo...

es una buena pregunta, sí.
acabo de volver de la selva.
vuelvo a escribir dentro de poco.

Anónimo dijo...

Querido alessandro...le escribo porque su ausencia se hace sentir. Quería de paso cañazo, preguntarleproponerle: ¿cree usted que sería posible establecer una especie de consultorio on line? Cree que pelusio podría sintonizar nuestras preguntas sin respuesta? darles la vuelta, enredarlas, despistarlas y hasta quizás amanzarlas? A mi me haria muy bien.

alessandro tambuzzi dijo...

estoy teniendo problemitas de tránsito lento, perdónenme. las anécdotas de Pelusio son infinitas, y se están acumulando cada vez más, ya ya ya prontito volverán

dalecuerda dijo...

oooh pelusio.
siempre tan sabio, siempre tan contundente.
mepareció verlo en un 504, celeste, año 80...puede ser...era él?

alessandro tambuzzi dijo...

si, iba para zona oeste